El aire se aloja entre la cavidad torásica y los pulmones. Se colapsan los pulmones.
Al rasgarse los pulmones, el aire escapa y se aloja en el mediastino, lugar central del pecho.
El aire que se ha escapado se aloja en los tejidos blandos del cuello.
Rotura de los sacos alveolares y pulmonares, el aire entra al flujo sanguíneo, fluye por las arterias, aumentando su tamaño al disminuir la presión ambiente
Respirar aire contaminado con monóxido de carbono alojado en el tanque de buceo
Bucear a mas de 30 m.
Exceso de dióxido de carbono en el torrente sanguíneo
Poca cantidad de dióxido de carbono en el torrente sanguíneo
Dolor frontal en los espacios debajo y alrededor de los ojos
Dolor en la cara y sensación de que los ojos se salen de las órbitas
Perdida de calor corporal